Hola a todos,
Esta semana me voy a tomar un pequeño descanso con la familia, pero intentaré seguir escribiendo para poder publicar un nuevo cuento en cuanto vuelva.
Por otro lado, como habéis podido comprobar, la mayoría de mis cuentos están basados en un niño o niña real, Carla, Olga, Sergio... Así que os propongo algo:
Si estáis interesados en que escriba un cuento de algún niño que conozcáis: hijo, sobrino, nieto, amigo, podéis enviarme un mensaje a mi correo electrónico (susmuez@yahoo.es), y en el plazo de una semana o diez días os enviaría el cuento. Para ello necesito unos datos: nombre del niño, edad, familia (padres, hermanos, primos, abuelos, amigos), también es muy importante saber que tipo de cosas le gustan (algún deporte, animales, juguetes) y algo de su personalidad ( si es tímido, extrovertido, muy hablador), vamos, todo aquello que me pueda servir para idear una bonita aventura en la que el o ella sea protagonista y sobre todo, se vea reflejado en el personaje. El cuento será único y exclusivo para ese niño.
Lo más importante de todo, no tiene ningún coste. Escribiré el cuento y os lo enviaré en un PDF a vuestro correo electrónico, v si luego queréis que lo publique en el blog, entonces lo publicaré.
Espero noticias vuestras.
La autora (Susana)
Este es un blog que quiere hacer llegar cuentos diferentes a todos aquellos que los quieran leer.
lunes, 30 de julio de 2012
miércoles, 18 de julio de 2012
LAS AVENTURAS DE NICO Y NILO 2
Hola de nuevo. Aquí va la segunda aventura de las pequeñas ardillas, Nico y Nilo. Esta vez tienen una fiesta y van a hacer una tarta. No cuento más. A leer....
LA TARTA
Corriendo fue a la cocina a
preparar un buen desayuno.
—¡Despierta, dormilón!—gritó
Nico a su hermano que todavía estaba en la cama.
—Déjame dormir. Todavía es
muy pronto.
Nilo metió la cabeza debajo de
la almohada. Le encantaba dormir y odiaba madrugar.
—Vamos, levanta. Ya está
listo el desayuno. He hecho tortitas con chocolate.
Nilo salió de la cama de un
salto. Adoraba las tortitas, sobre todo, si eran con chocolate.
—Hoy es la fiesta de mi amiga
Trudi y voy a hacer una tarta de moras—dijo Nico a la vez que recogía su plato
del desayuno—. Debemos ir pronto al bosque para recoger las mejores moras.
Mientras su hermana le
hablaba, Nilo estaba concentrado en
volcar todo el sirope de chocolate sobre las tortitas. Pronto éstas
empezaron a flotar por el plato.
—¡Pero qué estas haciendo! Te
has pasado con el chocolate.
—No me he pasado. A mi las
tortitas me gustan así ¡Mmm…qué ricas!
—Date prisa, Nilo. Tenemos
que irnos ya, se está haciendo tarde.
Los dos hermanos fueron
saltando de árbol en árbol y junto al río encontraron unos arbustos llenos de
enormes moras. Nico cogió su bolsa y comenzó a recogerlas. Era muy cuidadosa,
solo cogía las más grandes y sabrosas.
—¡Nilo, no te comas las
moras, no vamos a tener suficientes para el pastel!—gritó Nico al descubrir a
su hermano con toda la cara manchada de moras.
Nico siguió con su tarea, yendo
de arbusto en arbusto y seleccionando las mejores moras. Ya estaba terminando cuando se giró y
vio que su hermano había desaparecido.
—¡Nilo!¿Dónde estás?
Comenzó a buscarlo por los
alrededores, pero no contestaba. Volvió a llamarlo, pero seguía sin contestar.
Empezó a preocuparse.
Se acercó a unos arbustos y
de repente oyó un grito.
—¡Arghhhh…!¡ Soy el monstruo
del bosque!
Nico dio un grito y cayó al
suelo mientras su hermano no paraba de reírse. La broma había sido muy
divertida.
—¡Nilo! Deja de reírte, no ha
tenido gracia. Me has asustado— dijo su hermana muy enfadada—.Volvamos a casa,
todavía tengo que hacer la tarta.
Ya en casa, Nico comenzó a
cocinar. A ella le encantaba hacer tartas para sus amigos. Era una gran
cocinera. Nilo, que no era muy amigo de la cocina, decidió tumbarse en la cama
mientras se comía una cajita de bombones que tenía guardada debajo del colchón.
—Nilo, deja de comer y ven a
ayudarme, no puedo coger el bote de harina. Está muy alto.
Nilo se acercó y dio un gran
salto, intentado coger el bote, con tan mala suerte que éste se cayó derramando
toda la harina sobre su hermana.
—¡Pareces un fantasma!—dijo
Nilo sin parar de reír.
—¡Vete de aquí y no me ayudes
más!—gritó Nico muy enfadada—.Prefiero hacerlo sola.
Nilo se fue cabizbajo. Esta
vez se había pasado con la broma.
Nico, después de limpiarse,
siguió preparando la tarta. Comenzó a mezclar la harina con los huevos y el
azúcar y pasado un buen rato, tras poner la última mora, la tarta ya estaba
lista. Se sentía muy orgullosa, era una tarta estupenda y le había quedado muy
bien. Incluso había hecho un dibujo de su amiga Trudi.
Ya era casi la hora de la
fiesta. Nico decidió arreglarse, ya que le encanta ponerse guapa para las
ocasiones especiales. Era un buen momento para estrenar su nuevo lazo. Se miró
por última vez en el espejo, cogió la tarta y salio de casa muy contenta. Ya
podía ir a disfrutar de la fiesta con sus amigos.
Fue a buscar a su hermano. Se
había enfadado mucho con él, pero ya se le había pasado. Su hermano siempre le
hacía enfadar, pero al final, le perdonaba.
—¿Dónde estas, Nilo?—le llamó,
pero éste no le contestó.
Seguramente ya se había ido a
la fiesta, pensó. Así que decidió ir sola.
Al llegar a la fiesta vio que
Nilo ya había llegado y en su pequeña manita llevaba un precioso ramo de flores.
—Hola, hermanita. Toma estas
flores. Las he cogido para ti—dijo Nilo—.Perdóname, me he portado muy mal. Lo
siento.
Nico y Nilo se fundieron en
un gran abrazo, y como buenos hermanos, olvidaron la pelea.
Esa tarde lo pasaron bomba
con sus amigos y disfrutaron juntos de
la super fiesta de Trudi.
Qué le vamos a hacer. Nilo es
algo gamberrete, pero tiene un gran corazón y su hermana le quiere con toda su
alma. Al final la fiesta fue genial y la tarta estaba riquísima.
HASTA LA PRÓXIMA
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